La seguridad en la Ciudad de México siempre ha sido un punto rojo, y la situación es más grave para las mujeres que tienen que hacer uso de cualquiera de los servicios de transporte público, ya que las deja expuestas a sufrir diferentes tipos de violencia, desde asaltos, hasta acoso.
Si bien, en las ciudades más urbanizadas el transporte público tiene como característica ser un lugar seguro para todos, no ocurre lo mismo en la Ciudad de México, siendo el Metro y el Metrobús las opciones más seguras para viajar debido a sus espacios exclusivos para las mujeres.
Sin embargo, dentro de las otras opciones de traslado con las que cuenta la Ciudad de México, como los microbuses, camiones, taxis y los transportes por aplicación, las probabilidades de que una mujer se vea violentada aumentan, donde 9 de cada 10 mujeres han sufrido algún tipo de violencia.
La violencia en el transporte no sólo implica el daño generado en el momento, sino también en todas las repercusiones que causa a futuro, empezando por tomar medidas que implican limitar la libertad, desde el procurar viajar solas, no utilizar el transporte por la noche, hasta el cambio en la vestimenta.
Lo que más nos arde…
Las mujeres dejan de tener el mismo acceso a la movilidad como consecuencia de a violencia en el transporte, lo que implica una desigualdad frente a los hombres, que sufren en menor medida violencia de diferentes tipos.
Se necesitan realizar mejoras en la seguridad de los transportes para que las mujeres puedan gozar de una movilidad efectiva, o crear alternativas que brinden certeza de que llegaran sanas y salvas a sus destinos.
Fuentes: https://www.razon.com.mx/mexico/crece-el-acoso-en-metro-y-metrobus/
Es de ardidos 