La semana pasada se llevó a cabo un operativo en el penal de Topo Chico, en Nuevo León, para encontrar armas y demás objetos prohibidos en la prisión. Esto llevó a encontrar puntas metálicas (para ataques), un teléfono celular (smartphone), ¡y 140 mil pesos!
Así de increíble. Así como lo lee.
El primer día del operativo, se encontraron 19 mil pesos en efectivo, guardados en un envoltorio. El segundo día, se hallaron dos bolsas de plástico, con billetes de diversas denominaciones, que en total sumaban 123,608 pesos.
LO MÁS INTERESANTE
Ese dinero era utilizado por los reos para el narcomenudeo, dentro de la prisión. Muchas veces, sus mismos familiares recibían el dinero o la droga, para su venta en el exterior, y posteriormente repartir la ganancia.
Se han hecho públicas las declaraciones de los familiares de muchos reos, que dicen que otros internos les cobraban de mil a mil quinientos pesos a la quincena, para no golpear a su familiar.
De la misma manera, los lujos dentro de estas prisiones son mucho más caros que afuera de ellas. Una televisión portatil, un celular de gama baja o hasta un refresco, pueden costar el doble o triple de su precio normal.
LO QUE MÁS ARDE
La molestia proviene de saber que, en estas prisiones, no se va a purgar una condena, sino a aprender cómo ser un malhechor más eficaz. La extorsión y el control de los negocios delictivos se llevan desde adentro de estas instalaciones, y la misma policía es la que permite que suceda, pues el dinero puede más que la conciencia.
Es de ardidos 