En plena crisis económica los precios se van al cielo

El consumo básico está por los cielos y los mexicanos ya no saben cómo pagar los costos de la vida diaria sin empleo y confinados.

En 2020 la economía mexicana sufrió su crisis más severa en un siglo con más de 10 millones de nuevos pobres y el cierre de al menos un millón de micro, pequeñas y medianas empresas (MiPymes). Aunado a esto, aumentó considerablemente de alimentos de la canasta básica como la tortilla, el pollo y la carne de res, el precio de las computadoras, y de los servicios de telecomunicaciones, productos que en confinamiento se han convertido en herramientas imprescindibles en los hogares.

La pandemia nos afectó de diversas formas, entre ellas tuvo repercusiones en nuestros bolsillos, ya que atacó directamente a la canasta básica. En el 2020 hubo un aumento considerable del precio de la canasta alimentaria urbana y rural, siendo septiembre y octubre los meses en los que se disparó más en relación con el año anterior, como se puede observar en la siguiente gráfica, con datos del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (CONEVAL).

Lo que más nos arde

La inflación se ha disparado de un año a otro en un 4.67% en relación al año anterior, según el Índice de Precios Nacional al Consumidor (IPNC) del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), principalmente debido a los aumentos que presentó el precio internacional del petróleo en el periodo.