La estrella de Youtube Nath Campos subió un vídeo donde contó que fue víctima de abuso por parte del influencer Rix. En 40 minutos narró que el abuso se perpetró después de una salida con amigos.
El testimonio de Campos se viralizó de manera fugaz en medios digitales, no sólo porque se trata del caso de una influencer, sino porque ella expresó el sentimiento de miles de víctimas de abuso sexual. La confesión de la influencer reavivó la cloaca que se ha tratado de ocultar tras la fama, los likes y los seguidores que existen en la plataforma de Youtube.
Años atrás la youtuber Caeli confesó que viajó con algunos amigos, donde le quisieron hacer tomar una bebida adulterada. A este caso se puede sumar el de la plataforma Badabum, donde se vivía violencia sexual, acoso o explotación e incluso existía homofobia, situaciones expuestas por algunos ex miembros de la plataforma. A estas denuncias se suman las hechas contra Yayo Gutierrez, Juan de dios Pantoja o Yao Cabrera por mencionar algunas.
Las víctimas hablaron, aprovecharon la plataforma digital que en algún momento compartieron con sus compañeros. Las acusaciones en contra de influencers se suman a todas las carpetas de investigación por acoso que inundan los ministerios públicos del país.
¿Acaso los influencers no son figuras públicas que deben dar un ejemplo?, ¿o quizá la fama de la que gozan, las facilidades que les otorga el público digital les permiten hacer y deshacer a placer?
Lo que más nos arde
Las víctimas están levantado la voz, pero pese a esto plataformas como Youtube no se ha pronunciado al respecto.
La fama o el poder de influir en otros no justifican acosar o violentar a terceros, mientras las plataformas digitales se hacen de la vista gorda porque sólo les interesa generar contenido para aumentar ganancias.
Fuentes:
https://www.eluniversal.com.mx/espectaculos/youtubers-mexicanos-la-historia-de-abuso-y-acoso
Es de ardidos 