¿Alguna vez han pensado en abandonar el país? No para irse de vacaciones, sino para cambiar de residencia, definitivamente. Sorprendería que la respuesta fuera no, y es que hay muchos factores de nuestro país que nos duelen, y en pro de garantizar nuestro progreso como personas, podemos considerar abandonar nuestra tierra natal para buscar mejores oportunidades.
Imaginemos que harto de trabajar para otra persona, alguien decide emprender su propio negocio; que inspirado por la popular campaña “Pepe y Toño”, se informa y cae en la cuenta de que no será tan sencillo. Tendrá que atravesar por muchas dificultades, que son relativamente naturales para cualquiera que emprende un negocio.
Pero lejos de lo previsto, si reside en alguno de los estados con altos índices de inseguridad, como Sinaloa o Tamaulipas, es muy probable que un mal día, algún personaje de la delincuencia organizada, le obligue a dar una cuota por derecho de piso. Imaginemos lo difícil que debe ser afrontar esto para una PyME; considerando que este sector representa, nada menos que el 95% de las empresas en el país.
Ahora bien, es muy importante para cualquier persona, sentirse segura del lugar dónde vive, tener la certeza de que puede tener cualquier coche y por muy bonito o llamativo que sea, la policía se encargara de garantizarle seguridad. Lamentablemente esto no ocurre y, en su lugar, los policías se encargan, más de perjudicarnos, que de protegernos.
LO QUE MÁS ENCHILA
La lista de cosas que nos duelen de nuestra patria, es interminable; y si bien cada uno de nosotros podemos aportar nuestro granito de arena, para hacer que las cosas cambien, no lo harán, mientras siga habiendo gente que le parece más importante ser adinerado que honesto.
Resultará todo un reto crecer como país, mientras sigamos creyendo que: “El que no transa no avanza”.