La crisis de vivienda ha crecido descontroladamente en los últimos años y junto a ella se han agravado también otras problemáticas, como la invasión de inmuebles. Si bien esta última no es un fenómeno nuevo, sí es algo penado por la ley, pero eso no ha detenido a las personas a recurrir a esta práctica para obtener un hogar. Ante este panorama, el Gobierno de México y el Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit) anunciaron una solución que ha dividido la opinión de los mexicanos.
Octavio Ramiro Oropeza, titular del Infonavit, anunció su plan para, básicamente, ofrecer a las personas que han invadido, la opción de regularizarse en dicha vivienda. Un plan ordenado por la presidenta de México, Claudia Sheinbaum y que claramente ha sido criticado.
¿En qué consiste el plan?
Aquellas propiedades que sean detectadas como invadidas, en primera instancia podrán ser negociadas entre invasores y propietarios para el arriendo, y eventualmente se otorgará la opción a compra; pero las casas que cuenten con carpeta de desalojo o allanamiento, no podrán ser incluidas dentro de este plan. Las metas de estas acciones son formalizar a aquellas personas irregulares, ya que además se les facilitará la compra y pago del título de propiedad para estas viviendas.
Junto a este proyecto también se anunciaron otras acciones para la recuperación de predios dañados o abandonados y la inversión de nuevas viviendas, con el objetivo de apoyar también a los jóvenes a adquirir una vivienda. A su vez, el Infonavit espera recuperar los pagos de viviendas registradas que fueron abandonadas o cuyos montos no han sido completados.
Si bien este plan podría combatir las crisis que atraviesa México y ayudar con la recuperación de 800 mil casas en estado de abandono, expertos aseguran que es una situación que no debe tomarse a la ligera y que debe ser estudiada para no resultar contraproducente. Pues el sistema podría ser engañado, dañando a propietarios legítimos en distintas situaciones.
Fuentes:
Es de ardidos 