Aunque en el artículo 24 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, el ocio y el tiempo libre son presentados como derechos inherentes. En realidad, para las personas viviendo en condiciones de pobreza, estos pueden ser más un privilegio que un derecho. Pues con dificultades de tiempo, dinero y prioridades, muchas personas verán imposible poder dedicarse un poco de tiempo para ellos mismos o al menos algo que pueda aportar a su relajación, crecimiento y cultivación personal.
En países como México, la Ley Federal del Trabajo garantiza períodos de descanso y vacaciones pagadas, en los que idealmente se espera que las personas puedan acceder a un tiempo exclusivamente para ellos y actividades que les permitan descansar de sus responsabilidades; la realidad nos acerca a que muchos no pueden permitirse el costo de vacaciones, viajes o salidas dentro de su misma ciudad. Pues los descansos pueden destinarse a un segundo empleo o emprendimientos para completar gastos personales.
Sumado a esto, los costos e infraestructuras para acceder a distintos eventos recreativos suelen ser muy elevados o inaccesibles, pues muchos prefieren destinar ese tiempo y dinero a las actividades previamente mencionadas, o incluso a gastos a los que se les da más importancia.
En contraste, también existen los casos en los que disfrutar el tiempo libre se puede ver imposibilitado por una culpa constante de no dedicar el tiempo a la productividad o la presión por los pendientes laborales o las preocupaciones económicas, ciertamente, los factores pueden ser distintos.
Por otra parte, en esta sociedad, para las mujeres puede llegar a ser más difícil acceder a estos tiempos de ocio, pues muchas son cuidadoras de sus hogares, además de ser trabajadoras, por lo que el tiempo libre se dedica al cuidado de su familia.
¿Qué ocasiona la falta de acceso al tiempo libre?
Las enfermedades mentales, la fatiga, el estrés y enfermedades crónicas pueden aumentar en personas que viven en este estado de supervivencia constante; finalmente, la falta de descanso siempre reducirá la calidad de vida de las personas.
¿Qué se necesita?
Las mayores problemáticas para poder acceder a este tiempo libre surgen a partir de las diferencias económicas, por lo que es necesario garantizar salarios y jornadas justas de trabajo. Así como transportes eficientes, pues en México los tiempos de traslado del hogar al trabajo pueden ser de horas, lo que quita tiempo de descanso y ocio. La resolución de estas problemáticas también debe ir acompañado de la garantía de espacios y ofertas culturales y de recreación en lugares seguros, limpios y libres.
Fuentes: